Las dificultades para conseguir vivienda y la comodidad de trabajar a distancia han traído cambios notables a este mercado. Alfa Inmobiliaria, franquicia con más de 115 franquicias inmobiliarias en nuestro país, confirma que el número de personas interesadas en comprar vivienda fuera de las grandes ciudades se ha duplicado en los últimos dos años.
Impulsado por una variedad de factores económicos y sociales, este cambio de paradigma está haciendo que los pueblos y ciudades escasamente poblados vuelvan a ser una opción más interesante para comprar una vivienda.
“Como cadena de franquicias inmobiliaria también nos hemos interesado en abrir una oficina en zonas rurales antes olvidadas”, afirma Jesús Duque, vicepresidente de la compañía.
Para Duke, no hay duda de que las principales razones de esto son los precios de la vivienda en la ciudad, la falta de viviendas asequibles en las zonas urbanas y el alto costo de vida asociado a estas ciudades.

