El autoempleo como rehabilitador social

Todos tienen muy parecidos perfiles: varones jóvenes y de mediana edad, con problemas de adicción a las drogas, la mayoría ha estado en prisión por delitos menores, han tenido una vida muy complicada, pero todos se muestran dispuestos a cambiar y a afrontar el futuro con esperanzas e ilusión. Sin duda estamos hablando de los residentes, que se encuentran en proceso de desintoxicación, del centro que gestiona en Cartaya la Fundación para la Atención e Incorporación Social (Fadais), de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de Huelva

No obstante cuando salen de este centro, rehabilitados de sus adicciones a las drogas o el alcohol, el panorama que se encuentran en la calle es, en la mayoría de las ocasiones, bastante desalentador a la hora de intentar reincorporarse al mercado laboral, y más en estos tiempos. 


Una de sus principales salidas laborales es por tanto el autoempleo, o lo que es lo mismo, crear su propia empresa. Cuestión de la que están totalmente convencidos los responsables del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE) de Cartaya, que desde hace ya siete años viene organizando en la comunidad terapéutica de la localidad la jornada Tu proyecto, tu empresa. Fomento del emprendimiento, con el objetivo, según su responsable, Pedro Tavira, de «informar al colectivo sobre los pasos a seguir para constituir una empresa, así como sobre las ventajas que para ellos supone optar por ideas para el autoempleo como forma de acceder al mercado laboral». 

Y que mejor forma de hacerlo que mediante la experiencia de antiguos residentes del centro cartayero, que después de haberse rehabilitado de sus adicciones optaron por este camino y pusieron en marcha su propia iniciativa empresarial, gracias a la cual tienen ahora un trabajo y están sacando a sus familias adelante. 

Dos de ellos contaron este jueves, en el marco de estas jornadas, su propia experiencia a los actuales residentes del centro. Es el caso del cartayero Álvaro Pacheco (43 años), que con 30 años de experiencia en el sector de la pintura, el pladur y la decoración, las drogas se cruzaron en su camino hasta que lo llevaron durante casi seis años a prisión. 

En la cárcel onubense se incorporó voluntariamente a un programa terapéutico de desintoxicación, que prosiguió tras cumplir su pena en el centro Fadais. Una vez rehabilitado se convenció a sí mismo de que el mejor camino era el autoempleo, por lo que se hizo autónomo para dedicarse al marisqueo. 

Según narró, fue ampliando el negocio y ya comercializa directamente sus propios productos, además de estar inmerso en un proyecto que verá la luz muy pronto para instalar en Cartaya un centro de depuración de moluscos bivalvos especializado en almeja fina, coquina, ostra y longuerón. Aseguró que ya tiene resuelto hasta el tema financiero para la inversión necesaria. 

Por su parte el sevillano Enrique Benítez (48 años), con una situación muy similar al anterior en cuanto a adicción a las drogas durante más de dos décadas y de cumplimiento de penas en prisión, una vez desintoxicado también en el centro Fadais-Cartaya, retomó la actividad tradicional de su familia, dedicada a la venta de aceitunas en la capital hispalense. Empezó invirtiendo en una furgoneta y desde hace ya tres años tiene licencia para le venta de este producto en un mercado sevillano. Aseguró que gracias a dicha actividad puede dar de comer a su mujer y a sus tres hijos. 

La jornada celebrada ayer en el centro terapéutico cartayero incluyó un concurso de ideas de negocios, en cuyo marco los residentes trabajaron en grupos la hipotética puesta en marcha de una empresa, que después expusieron en público en una interesante puesta en común de las ideas. Los grupos que se formaron para llevar a cabo esta actividad trabajaron así durante toda la mañana en la puesta en marcha de un negocio de comidas caseras 24 horas, en otro de venta de ropa por Internet, en un picadero-yeguada, un polvero de materiales de construcción, un gimnasio, una empresa de ocio y tiempo libre especializada en actividades náuticas, y un estanco. 

Después de tanto número, tanto plan de viabilidad y tantos objetivos de ventas y de negocio, la jornada finalizó con una actividad de animación al teatro con la representación deLa loca historia de Cristóbal Colón, a cargo de Platalea.

Via: huelvainformacion.es

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